El artista plástico Carlos Arturo Camargo Vilardy fue invitado por la UNESCO a participar del evento que, bajo el título Colores para el planeta, se celebra en Andorra cada dos años desde su inauguración en 2014. Camargo, conocido en La Gaceta por entrevistas anteriores y gracias a textos esporádicos de su autoría, fue uno de los 30 artistas del mundo que esta vez fueron convocados al país europeo, donde cada uno de los participantes debía realizar tres obras para ser donadas a la UNESCO y que esta entidad llevará a múltiples exposiciones a través del planeta, en su afán de promover la cultura y la paz. El escultor y pintor colombiano, radicado en Tampa, accedió a respondernos algunas preguntas, con el fin de compartir esta rica experiencia de connotación universal.
Participaste
recientemente en el encuentro entre
artistas plásticos Colores para el planeta, ¿qué representó para ti esta
invitación?
Fue una de las más
bellas y profundas vivencias que he tenido en mi vida de artista, por el nivel
creativo del evento, la calidad de los artistas y el ambiente afectivo que se
desarrolló más allá de la exposición de clausura, porque se creó un grupo de
whatssap en el que continuamos comunicándonos, compartiendo intereses
conceptuales, amistad y relaciones internacionales con galerías de arte, lo que
abre futuras posibilidades de exponer.
¿Qué objetivos
se propone este encuentro entre pintores de diferentes regiones del mundo?
El objetivo de la
Unesco es buscar la paz, la protección, la unidad en el mundo, reconociendo las
culturas y estimulando los aportes del arte hacia la creación de una cultura
superior, por esa razón la convocatoria y selección de los artistas se hace
entre los cinco continentes, exaltando los valores multiculturales a partir del
lema “ Colores para el planeta”.
La convocatoria para la edición de ArtCamp Andorra indica que
“tendrá lugar en el marco del Decenio Internacional de las Lenguas Indígenas
(2023-2032) declarado por la UNESCO y se centrará en temas estratégicos como la
promoción de una cultura de paz y el desarrollo sostenible”. Cómo participante
del encuentro, ¿cómo apreciaste en las obras y los diálogos entre los artistas
la presencia de este propósito?
![]() |
El escultor y pintor Camargo muestra las obras presentadas en Andorra |
El artista por su naturaleza intrínseca y su sensibilidad
educada o evolucionada es un humanista, un protector y embellecedor del planeta
y la vida. por lo tanto, los artistas dentro de su libertad creativa están
conscientes y comprometidos con el desarrollo sostenible, que es una de las
grandes responsabilidades del mundo contemporáneo. Por eso, la Unesco fue la
organización creadora y difusora de preservar los valores culturales y las
tradiciones que enaltezcan a la humanidad.
¿Cómo valoras la relación que se estableció entre los
artistas participantes en el evento de Andorra?
![]() |
Camargo (segundo de iz. a der., segunda fila), juntoal grupo de artistas que expusieron en Andorra 2023. |
Desde el arribo al hotel donde nos alojaron a todos, la
relación se fue dando espontáneamente, en la medida de la llegada y los
encuentros casuales, con intercambios de nombres personales y país de origen.
En los encuentros en el comedor, que desde un principio
fueron muy cálidos entre los recién conocidos, poco a poco afloró el sentido
del humor que genera la expectativa de un encuentro nuevo.
En el estudio de trabajo colectivo, con buen espacio, luz,
temperatura agradable, el aporte de los materiales requeridos y el
acompañamiento permanente e insuperable de los miembros de la Unesco: Jeas
Michel Aritengol, directivo de esa entidad; Janin Mir, coordinadora del evento,
el escultor Faust Cam, el fotógrafo Alain Montane y otros.
Luego tuvimos la visita de la directora General de la
Unesco: Audrey Azoulay, quien vino desde su oficina en París para hacer con su
presencia la apertura oficial del ArtCamp, imprimiéndole un carácter de
integración, unidad y alegría al evento. Con ella, se compartió un almuerzo en
un espléndido lugar al aire libre.
En el desarrollo individual de las obras se respiraba un
ambiente de trabajo como el de las facultades de arte cuando uno es un
estudiante. Los diálogos, las expectativas creativas, los conceptos, la euforia
de colores, etc, nos fueron introduciendo en un vibrante estado de ánimo
permanente que estrechamos lazos afectivos, sin ningún celo artístico. todos
admirados mutuamente de la riqueza y calidad de técnicas que iban surgiendo.
Háblame de tus obras creadas allí y del destino que
tendrán esas pinturas.
Las obras creadas allí que en total fueron tres, son
propiedad de la Unesco. Las mismas serán exhibidas durante un año en distintos
lugares de Andorra y luego estarán itinerando por los países pertenecientes a
la Unesco.
¿Qué presencia hispanoamericana hubo en ArtCamp Andorra
2023?
Fuimos únicamente tres artistas suramericanos: Claudio
Ramírez, de Brasil; David, de Guatemala, y yo, colombiano.
¿Qué mensajes quisieras compartir de esta experiencia
artística y humana?
Esta experiencia definitivamente deja huellas en uno como
artista, independientemente de la trayectoria o edad que tengas, por las
múltiples enseñanzas y vivencias emocionales; es como estar en una Bienal, sin
el espíritu competitivo, sino en el goce del arte como creación.
El mensaje humano que quiero compartir es que la experiencia
multicultural en el arte no solo ayuda a entendernos y respetarnos, sino
también a amarnos. Este propósito de la Unesco lo viví en Andorra y deberíamos
multiplicarlo en el mundo con todas las diciplinas estéticas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario